Cuando se aplicó este plan
en el otoño de 1914 parecía haber sido un todo un éxito. La rápida incursión de
los alemanes a comienzos de agosto aniquiló al Ejército Belga, que abandono las
plazas más fuertes de Lieja y Namur y se refugió en la fortaleza de Amberes.
Las tropas alemanas, que iban a gran velocidad, derrotaron a los franceses en
Charleroi y a la Fuera Expedicionaria británica en Mons, lo que hizo la
retirada de Bélgica de toda la línea aliada. Al mismo tiempo, los alemas
expulsaron a los franceses de Lorena, que había sido invadida, y les obligaron
a retirarse de la frontera de Lexemburgo. Los contingentes británicos y
franceses no tardaron mucho en retroceder hasta el río Marne, pero tres
ejércitos alemanes se dirigieron velozmente hacia su posición, por lo que
tuvieron que cruzarlo. La caída de la capital francesa parecía tan inminente
que el gobierno galo se trasladó a Burdeos. Sin embargo, una vez que los
alemanes habían cruzado el Marne, los franceses que eran dirigidos por el
general Joseph Joffre, rodearon París y atacaron al ejército alemán, mandado
por el general Alexander von Kluck, situado a a la derecha de los tres
ejércitos que avanzaban hacia la capital francesa.
En la primera batalla de
Marne, que fue desarrollada desde el 6 hasta el 9 de septiembre, lo franceses
consiguieron para el ejército de Kluck, que se había alejado de las otras dos
fuerzas alemanas y no pudo recibir refuerzos. Además los alemanes habían
perdido una parte de sus tropas el 25 de agosto, cuando el general Helmuth
Johan von Moltke, jefe de Estado Mayor alemán, pensando que ya se había alcanzado
la victoria en el frente occidental, envió seis de estas unidades al oriental.
La presión francesa sobre el flanco derecho alemán obligó al ejército de Kluck
a retirarse, y posteriormente todas las fuerzas alemanas retrocedieron al río
Aisne. Los franceses avanzaron e intentaron expulsar a los alemanes del
territorio próximo a dicho río, lo que provocó las batallas del Aisne, del
Somme y del Arras. Sin embargo, no les fue posible desalojar a los alemanes de
esta posición, y estos extendieron sus líneas por el este hacia el Mosa, al
norte de Verdún. Ambos contendientes intentaron entonces alcanzar al mar del
Norte, donde se encontraban los puertos del canal. Los alemanes no pudieron
alcanzarlo debido a que los belgas habían inundadola región del río Yser. La
parte occidental de las líneas aliadas estaba ocupada por los británicos, que
se hallaban ya en Ypres (situado en el extremo siroccidental de Bélgica) en la
carrera en el canal.
Los alemanes, después de
tomar Amberes el 10 de octubre, intentaron cruzar las posiciones de los
británicos en Bélgica, pero no pudieron cumplir su objetivo tras las
denominadas batallas de Flandes. En diciembre, los aliados lanzaron una serie
de ofensivas a lo largo de todo el frente, desde Niewpoort por el oeste hasta
Verdún en el este, pero no consiguieron conquistas territoriales
significativas.